Trump, un vaquero empresario...
Estamos empeñados en comprender a Trump aplicando criterios de política o incluso de criterios europeos. Esto es un error. Trump es un empresario estadounidense y solo así se entiende su modo de actuar.
La élite empresarial europea está compuesta por personajes que orinan colonia y defecan perlas de Majorica, por lo que tienen afrancesados modos de actuar.
Trump es un vaquero cateto con dinero que, cual urraca, le pierde el brillo, con formas de garrulo de barbacoa muy agresivo. Mientras el empresario europeo negocia con modos educados, Trump lo hace con formas y actitudes de pistolero vaquero violento.
Si aplicas criterios políticos no le entiendes, pues él gestiona como empresario, pero es que si lo evalúas como empresario europeo no le comprendes, pues su modelo es Billy el niño o de los Hermanos Daltón.
Cuidado, que despreciar a Trump no solo es un error estratégico comercial, sino un error político que desprecia a los millones de americanos que gustan de su modelo. No está loco, no es un tonto, es la imagen de un pueblo construido por vaqueros con pistola, unidos por el correo y el tren, pero que siguen con sus taras racistas, e ínfulas de superioridad.
Intentar comprender a EEUU con mentalidad europea es no comprender que estás ante un modelo diferente de creación, mentalidad, cultura y formas de pensar, que merece todo el respeto del mundo, pero que ni mucho menos es similar al nuestro y que, en la medida que defiende el modelo de la libertad, hay que asimilar y aprender de él.
El problema de Europa es que, con formas sofisticadas, se compone de estados catetos o provincianos que se miran el ombligo, desprecian al vecino con el que les cuesta colaborar, que se consideran egregios personajes del pasado, a los que no llegamos ni a la suela del zapato, y que miran el otro lado del charco como si fuesen extraterrestres o indios sin culturizar. Siguen aplicando criterios decimonónicos y desprecian a las indias que solo desde la visión regeneradora de Salamanca se superaron y frente a los que, desde la ignominia, construyeron una leyenda negra que les mantiene en el pasado.
Tenemos que comprender el momento, gestionarlo con inteligencia, fortaleciendo los lazos de cooperación intraeuropea y con USA en lo ideológico y geoestratégico, para después saber gestionar la economía con la mentalidad del vaquero, sin cesiones, sin sometimiento, pero con seriedad, solvencia y aplicando win to win, es decir, dando pan y sacando la fuerza a relucir.
Es muy difícil gestionar esta situación, pero solo desde la empatía el respeto puedes ganar al esquizofrénico e imprevisible, pues si presentas frente a él a un psicópata hostil, sólo generas enfrentamiento, ruina y hecatombe.
España debe presentarse como el socio más fiable posible de EEUU y como nexo de unión con la Unión Europea y el mundo anglosajón, a la par que debe construir una unión hispanoamericana de comercio unido al estilo commanwealth que nos haga grandes y fuertes, conscientes de que tenemos que cabalgar contradicciones que nos deben de devolver a los momentos gloriosos de nuestra historia, en los que el modelo judío cristiano cultural marcó nuestro esplendor.
Debemos de ser conscientes de que para TRUMP, para EEUU, el enemigo es el comunismo Chino y que cualquier acercamiento no consensuado entre todos los miembros de la Unión Europea y perfectamente explicado a TRUMP puede suponer un problema no sólo de presente, sino de futuro, de difícil resolución.
Movernos en la ambigüedad, el comunismo, o en la disidencia no nos ayudará y nos hará perder nuestra idiosincrasia como liberales defensores de la libertad, el respeto a los menos favorecidos, en un equilibrio constante entre libertad, solidaridad e igualdad constructora de futuros prósperos.
España se juega sus papel como potencia útil, defensora del modelo de libertad, de democracia y potente económicamente se la está jugando y los errores de Sánchez, más preocupado de su imagen, de su ser, de su posición, está dañando gravemente el futuro de nuestro país.
Entre los asistentes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump; el de Argentina, Javier Milei, país natal del pontífice; o el de Brasil, Lula da Silva
La península organizó un referéndum de adhesión a Rusia en marzo de 2014, una consulta considerada ilegítima por Ucrania, la ONU, la UE e incluso EEUU
Deslizó la idea durante una cena con el embajador galo en Países Bajos y añadió, a preguntas de la prensa, que es algo que "eventualmente" podría ocurrir